El violento terremoto en Japón seguido de tsunami es el segundo desastre que deben afrontar en muy poco tiempo las compañías de seguros, ya golpeadas hace menos de un mes por el sismo de Christchurch, en Nueva Zelanda.
El viernes, las acciones de los reaseguradores europeos caían en las bolsas: a media jornada, los alemanes Munich Re y Hannover Re perdían en torno a 5% cada uno en Francfort, igual que Swiss Re en Zurich, mientras el francés Scor se hundía más de 7% en el mercado parisino.
Un sismo de magnitud 8,9 azotó el viernes Japón, seguido de numerosas réplicas y tsunamis, generando alertas en todo el Pacífico, y dejando centenares de muertos.
"Tras las inundaciones en Australia (a principios de año), el terremoto en Nueva Zelanda (a fines de febrero) y ahora el sismo en Japón, la factura de los reaseguradores se anuncia muy elevada para los primeros meses del año", según un especialista del sector que requirió el anonimato.
Los reaseguradores estarán "mucho mas afectados" por la catástrofe que los aseguradores primarios, ya que su función es precisamente la de cubrir a los aseguradores, recordó a la AFP Christian Muschick, analista del banco privado alemán Silvia Quandt.
El primer reasegurador mundial, el alemán Munich Re, "puede definitivamente enterrar sus objetivos de resultados para el año en curso", afirmó.
El jueves, Munich Re advirtió que no llegaría a obtener en 2011 un beneficio neto esperado de 2.400 millones de euros si el impacto de las catástrofes naturales se revela superior a las previsiones.
Swiss Re, segundo reasegurador mundial, y el francés Scor, también hicieron saber que aún era demasiado pronto para dar cifras sobre las consecuencias financieras de la catástrofe.
Según una nota de la sociedad de corretaje JPMorgan Cazenove, el coste vinculado al sismo en Japón podría situarse entre 1.000 y 2.000 millones de dólares solamente para los reaseguradores europeos, aunque se trata de una estimación "muy preliminar".
"Es un gran sismo, pero los daños son visiblemente menos importantes que los causados por el terremoto de Kobe" en 1995, ya que el epicentro se hallaba en el mar, y cerca de una región menos poblada, dijo Muschick.
En 1995, el sismo de Kobe costó 3.500 millones de dólares al sector de los seguros, y tuvo un coste total de 100.000 millones de dólares, según Swiss Re. Causó mas de 6.400 víctimas.
Como California, Japon está "muy bien preparado" para este tipo de catástrofes, y los reaseguradores se cuidan de limitar y diversificar sus riesgos en estas regiones, subrayó Muschick, que augura un alza de las tarifas de reaseguro.
Por ello, este tipo de catástrofe significa "ingresos mas elevados uno o dos años mas tarde", destaca JP Morgan Cazenove.
En 2010, las catástrofes naturales ya fueron muy costosas para el sector de seguros: unos 37.000 millones de dólares, según Munich Re.